Contigo pan y cebolla*

¿Te acuerdas de la canción de Pedro infante? Esa que decía “¡Oye bartola!, Hay te dejo estos dos pesos, pagas la renta, el teléfono y la luz”. En los tiempos de mi abuelita las cosas del dinero eran más claras. Mi abuelito traía el dinero y mi abuelita lo administraba. Ahora, ¿quién sabe? A veces pienso que mientras más dinero más problemas, pero luego dicen que cuando el dinero falta el amor sale por la ventana.

El dinero en la pareja es un tema viejo. Ya lo decía Gorostiza en 1833, cuando escribe la comedia Contigo pan y cebolla. En ella se lee como una pareja enamorada acepta eso de contigo pan y cebolla, que significa que con tal de estar juntos comemos lo que sea. No importa el dinero, sólo importas tú. Eso ocurre en la comedia y en muchas parejas románticas. Luego, ya lo decíamos antes, el enamoramiento se va cambiando y eso del pan y la cebolla ya no suena tan bien.

En las condiciones de hoy, donde cada vez más mujeres trabajan y ganan dinero, los acuerdos económicos ya no son como lo eran en el siglo XIX. ¿Qué sucede cuando una mujer gana más que su esposo? ¿Le pega en la masculinidad o más bien le estorba a ella que no gane tanto porque entonces lo siente menos sexy? Parece que en cualquier pareja el tema del dinero es una cuestión de poderes. Hoy hay que hacer nuevas alianzas y a veces eso no es tan fácil. Frases como “quien paga manda” o “me hago mi guardadito para protegerme” son comunes en parejas que acuden por ayuda al psicoanálisis. Todo puede suceder cuando el dinero entra en juego si no se aborda el tema con confianza y comunicación. Con el psicoanálisis podemos trabajar para alcanzar acuerdos con nuestras parejas de tal forma que no se ponga en juego nuestra identidad.

*Comedia original en cuatro actos, Manuel Eduardo de Gorostiza, Madrid 1833

Post by Centro K

Comments are closed.